Polestar surgió en 1997 como Flash Engineering, y se especializaba en tuning de alto rendimiento de vehículos Volvo, su empresa matriz. En 2017 se transformó en una marca independiente especializada en vehículos eléctricos con sede en Gotemburgo (Suecia), participada por Volvo y la china Geely. Los coches eléctricos de Polestar se diseñan en Suecia con la sostenibilidad y el rendimiento como objetivos principales.
Polestar está presente en 28 mercados de cuatro continentes, y ha apostado por el patrocinio deportivo para dar a conocer su marca en todo el mundo. En Singapur patrocina el Open de Tenis, en Australia patrocina al equipo de fútbol Melbourne Demons y en Alemania se ha anunciado un acuerdo de patrocinio de tres años con el Borussia Dortmund, que en 2024 fue finalista de la Champions League.
La marca sueca ofrece vehículos eléctricos de alta gama y altas prestaciones; sus ventas han crecido en los últimos años hasta alcanzar el umbral de rentabilidad y ahora quieren dar el siguiente paso: crecer de forma orgánica en los mercados en los que está presente y dar a conocer su marca para seguir creciendo en aquellos mercados en los que todavía no está presente. Las críticas que ha recibido su último modelo, el Polestar 4, le auguran un futuro prometedor.

En los próximos meses presentará sus modelos 5, 6 y 7; el Polestar 7 se fabricará en Eslovaquia, lo que hace pensar que el mercado europeo es el principal objetivo de Polestar en los próximos años. La alianza con el Borussia Dortmund sin duda le dará visibilidad en uno de los mercados más apetecibles para los fabricantes de vehículos eléctricos.